44. La frivolidad de las reuniones da por el resultado el atraer a los espíritus
ligeros, que buscan otra cosa que ocasiones de engañar y mistificar. Por la misma razón
que los hombres graves y serios no van a las asambleas ligeras, los espíritus serios no van
más que a las reuniones serias, cuyo objeto es la instrucción y no la curiosidad. En estas
reuniones es donde se complacen los espíritus superiores en ofrecer su enseñanza.