23. Lo que engendra la duda en el pensamiento de muchas personas sobre la
posibilidad de las comunicaciones de ultratumba es la idea falsa que se forman del estado
del alma después de la muerte. Se la imaginan, generalmente, como un soplo, a manera
de humo, como algo vago, apenas apreciable al pensamiento, que se evapora y se va no se
sabe a dónde, pero tan lejos, que cuesta trabajo comprender que pueda volver a la Tierra.
Si, por el contrario, se la considera como un cuerpo fluídico, semimaterial, con el que se
forman un ser concreto, individual, nada tienen de incompatible con la razón sus
relaciones con los vivos.